Un implante dental es una maravillosa pieza de la tecnología dental. Es una raíz artificial de titanio, como un pequeño poste o tornillo, insertado en el hueso maxilar superior o inferior que proporciona una base sólida sobre la cual se puede colocar coronas o puentes de porcelana, o bien, dentaduras. Funcionan exactamente igual que la raíz del diente natural, proporcionando su misma función. Con implantes dentales usted puede masticar, hablar con naturalidad y sonreír con confianza. Casi cualquier persona que ha perdido un diente, varios dientes, o incluso la totalidad de sus dientes es un candidato para implantes dentales.
Clínicamente probados con gran éxito, mejoran su salud y su calidad de vida. Usted podrá nadar, practicar equitación, esquiar, jugar con los niños, realizar presentaciones de negocios y comer todo lo que le gusta sin preocuparse porque sus dientes se muevan o se caigan. Los implantes dentales se fijan en su lugar y pueden durar toda una vida. Son claramente uno de los mejores y más predecibles tratamientos que ofrece la odontología moderna.
¿Para qué sirve un implante dental?
Beneficios: